SANTIAGO DE COMPOSTELA


Santiago de Compostela es una ciudad y municipio de España, situada en la provincia de La Coruña, siendo la capital de la Comunidad Autónoma de Galicia desde 1982, tras una decisión política.[1]

Está situada a 65 kilómetros al sur de La Coruña y a 62 kilómetros al norte de Pontevedra. Incluye los antiguos municipios de Conxo (incorporado en 1925) y Enfesta (alrededor de 1970). La ciudad antigua es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1985.

En ella tiene su sede el gobierno autónomo gallego (Xunta de Galicia) y el Parlamento. Destaca por ser un importante núcleo de peregrinación cristiana, tras Jerusalén y Roma, debido a la creencia de que allí se dio sepultura al Apóstol Santiago el Mayor. De especial importancia artística es su Catedral dedicada precisamente al Apóstol Santiago el Mayor. Es también relevante su Universidad, de más de 500 años de historia, la cual concede a la ciudad un agradable ambiente estudiantil, con 30.000 alumnos matriculados cada curso. Además es el fin de la vía originariamente construida por el Imperio romano del Camino de Santiago, privilegio que otros conceden a Finisterre. En 2007, Santiago de Compostela fue la quinta ciudad menos soleada de España, con 1.958 horas de sol, según se desprende de los datos de los que dispone el Instituto Nacional de Estadística, recogidos en su anuario estadístico.
La historia de Santiago de Compostela se remonta a la prehistoria, la cultura castreña, la llegada de los romanos y, como punto de inflexión, el encuentro del enterramiento del Apóstol Santiago. A partir de ese momento la ciudad se conformará en torno al centro de poder representado por el arzobispo de Santiago y su representación física, la Catedral. El Camino de Santiago marcó desde entonces el devenir de la ciudad.
Orígenes [editar]
Extensión aproximada de la Villa Sancti Iacobi.

En el territorio que actualmente ocupa la catedral de Santiago existía un poblado romano, que se tiende a identificar como la mansión romana de Aseconia y existió entre la segunda mitad del siglo I y el siglo V. El poblado desapareció pero permaneció una necrópolis reutilizada como cantera que estuvo en uso quizás hasta la época del Reino Suevo de Galicia, llegando hasta el siglo VII.

El nacimiento de Santiago como se conoce ahora está ligado al descubrimiento (presumible) de los restos del Apóstol Santiago entre el 820 y el 835, la elevación del rango religioso de los restos, la Universidad y, en la actualidad, la capitalidad de Galicia.

Según una tradición medieval, como aparece por primera vez en la Concordia de Antealtares (1077), el eremita Pelayo, alertado por luces nocturnas que se producían en el bosque de Libredón, avisó al obispo de Iria Flavia, Teodomiro, quien descubrió los restos de Santiago el Mayor y de dos de sus discípulos en el lugar en que posteriormente se levantaría Compostela, topónimo que podría venir de Campus Stellae (Campo de la Estrella), o más probablemente de Composita tella (tierras hermosas), eufemismo por cementerio. El descubrimiento propició que Alfonso II, necesitado de cohesión interna y apoyo externo para su reino, hiciera un peregrinaje --anunciado en el interior de su reino y en el exterior-- a un nuevo lugar de peregrinación de la cristiandad en un momento en que la importancia de Roma había decaído y Jerusalén no era accesible al estar en poder de los musulmanes.